octubre 16, 2012

Convivios nocturnos

En casa tenemos cucarachas. Unas pequeñitas niñas color rojo cobrizo, que se pasean alrededor del escusado cuando la noche les da el permiso que, no tengo idea dónde, aguardan ansiosas durante el día. Son como niñas jugando en el jardín, aunque las supongo menos conflictivas, y van de un lado para otro lentamente, con miedo de mi mano que encenderá, guiada por la vejiga, una luz acusadora que a su vez guiará a mi pie para, de una vez y con fatalidad, terminar el juego en que se encuentran. A la noche siguiente volverán. Las invencibles son ellas y no mi inaudita y colosal ventaja en estatura.