patio tranquilo
el portón lo protege
del alboroto
o
patio aflijido
grandes muros lo alejan
del alboroto
enero 20, 2009
enero 15, 2009
La óxidación es reducción
Los pedales se oxidan y se caen. Ahí va uno rodando sobre el asfalto y un señor amaga con recogerlo, pero parece que el traje no lo permite. Regreso, lo tomo y de cojito vuelvo a casa a guardar la bicicleta.
Uno supondría que las cosas se oxidan por falta de uso o por exceso de agua. Pero los pedales se han usado mucho últimamente y no les ha llovido (una leve chispeadita hace 2 días, nada importante) así que supongo que el óxido es otra de esas cosas caprichosas que se dan de pronto.
Supongamos pues, que un día el capricho me oxida y caigo, cual pedal de bicicleta, en plena calle. O supongamos mejor que me oxido en esta misma silla, con un índice en la efe y el otro en la jota. No vayamos, por favor, a suponer que me oxido incompleto (sólo un huevo o un hombro o mi rodilla que ahí va), imaginemos una atrofia general y definitiva que me reduzca.
Me pregunto si ese día me pasará lo mismo que al pedal que todavía traigo en la mochila completamente olvidado hasta este preciso momento en que, adrede, traté de recordarlo. Supongo que el olvido sería sólo uno de los posibles destinos, ni el más ni el menos afortunado.
Uno supondría que las cosas se oxidan por falta de uso o por exceso de agua. Pero los pedales se han usado mucho últimamente y no les ha llovido (una leve chispeadita hace 2 días, nada importante) así que supongo que el óxido es otra de esas cosas caprichosas que se dan de pronto.
Supongamos pues, que un día el capricho me oxida y caigo, cual pedal de bicicleta, en plena calle. O supongamos mejor que me oxido en esta misma silla, con un índice en la efe y el otro en la jota. No vayamos, por favor, a suponer que me oxido incompleto (sólo un huevo o un hombro o mi rodilla que ahí va), imaginemos una atrofia general y definitiva que me reduzca.
Me pregunto si ese día me pasará lo mismo que al pedal que todavía traigo en la mochila completamente olvidado hasta este preciso momento en que, adrede, traté de recordarlo. Supongo que el olvido sería sólo uno de los posibles destinos, ni el más ni el menos afortunado.
enero 05, 2009
negaciones
quiero gritar con fuerza que esto no existe
que no ha pasado nada todavía
(mi grito es solamente un tranquilo hervir del agua)
decir que no han entrado a escena
los quinientos elefantes barritando
los monociclos los malabaristas los cañones
que mienten los brillos y los reflectores
que no existen estas inquietas mariposas
que la realidad es estar solo otra vez y dormir bien
que mi vida no es un baile no una salsa no una serie de pregones
que todo buen solo de trompeta se termina
:
no existen mienten no han entrado a escena
no ha pasado nada todavía
la realidad no es baile es dormir bien y se termina
por hoy ya no me creo
soy otra vez el niño que quiere regresar sobre sus huellas
y eso no es bueno
que no ha pasado nada todavía
(mi grito es solamente un tranquilo hervir del agua)
decir que no han entrado a escena
los quinientos elefantes barritando
los monociclos los malabaristas los cañones
que mienten los brillos y los reflectores
que no existen estas inquietas mariposas
que la realidad es estar solo otra vez y dormir bien
que mi vida no es un baile no una salsa no una serie de pregones
que todo buen solo de trompeta se termina
:
no existen mienten no han entrado a escena
no ha pasado nada todavía
la realidad no es baile es dormir bien y se termina
por hoy ya no me creo
soy otra vez el niño que quiere regresar sobre sus huellas
y eso no es bueno
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